Cuando hablamos del nuevo curso no solo nos referimos al colegio, también empezamos una nueva etapa del año después de las vacaciones, con la vuelta a la rutina y el comienzo de nuevos propósitos y objetivos. Vamos a incluir el ahorro entre ellos que seguro que nos vendrá muy bien.

Ya que hablamos de cursos, vamos a dedicar un rato a la asignatura pendiente de todos los años, guardar un poco de dinero cada mes para cuando haga falta por un imprevisto o para objetivos concretos, tanto individuales como de la familia, eso se llama ahorro y hay que practicarlo de forma permanente ya que si no lo hacemos corremos el riesgo de vivir al día, y cuando nos haga falta no tendremos una reserva a la que recurrir.

Seguro que has oído hablar de la costumbre de dedicar sobres a los gastos habituales, introduciendo una cantidad en ellos de la que no nos podemos pasar cada mes. De esta manera se trata de ajustar los gastos a los ingresos familiares, por lo que solo habría que hacer lo propio con un sobre dedicado al ahorro, pero esa práctica de hace años hoy no tiene mucha lógica, ya que existen otras fórmulas que nos ayudan a generar y controlar lo que ahorramos, aunque el fundamento es el mismo, controlar el gasto.

Y como siempre la tecnología acude en nuestra ayuda, contamos con App’s, sitios web, nuestro propio banco, seguros, etc. Vamos a ver un poco de información al respecto a continuación.

Pero más allá de buscar una ayuda tecnológica lo primero que necesitamos es tener una idea de cual es la cantidad que deberíamos ahorrar en función de nuestros ingresos. Hay muchas reglas disponibles si buscas en Internet y seguro que alguna te vale, pero lo que parece ser razonable para los expertos es que el 70% de los ingresos se debe destinar a necesidades básicas, y el resto a otros fines entre los que se encuentra el ahorro. Complementariamente hay teorías que dicen que el ahorro no puede ser tan pequeño que no se aprecie el resultado de hacerlo, y para ello y sin que excedas de tus capacidades, el porcentaje aproximado que deberías ahorrar sería del 10% de tus ingresos.

Una vez hecho esto, ya es el momento de buscar ayuda y las App’s lo invaden todo, muchas de ellas para facilitarnos la vida, así que el ahorro no iba a ser una excepción. Los bancos ya incluyen entre sus servicios la posibilidad de analizar nuestros gastos para que se pueda planificar el ahorro consiguiente, pero más allá de los bancos, existe algunas soluciones independientes una de las más completas es FINTONIC, que además de controlar lo que gastamos te ayuda a establecer objetivos mensuales de ahorro y te da información de la consecución de todo ello, y de forma automática ya que conecta con tus bancos y te da los datos de manera automática; otra de las que merecen la pena es Spendee, a diferencia de la anterior debes incluir los gastos de forma manual y puedes fijar alarmas por lo que te mantiene al día de los objetivos.

Para terminar, ten en cuenta esos gastos evitables, que son pequeños, y por lo tanto poco importantes, pero que al cabo del año hacen que nos desviemos de lo previsto para el importante capítulo del presupuesto familiar que es el ahorro.