QUÉDATE EN CASA, PERO NO TE OLVIDES DE LA VITAMINA D
Parece que la
falta de vitamina D es casi una epidemia mundial, o eso creen en la
SEEN (Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición)
Podíamos empezar con un rollo médico o químico sobre la vitamina D y la forma en que el cuerpo humano la procesa, pero vamos a ir al grano que es lo mejor.
La
vitamina D es muy importante para la salud de nuestros huesos, como sabemos el calcio es fundamental para tener unos huesos sanos y el calcio solo es procesado por nuestro cuerpo si la vitamina D está presente en él, ¿Y qué pasa si tenemos déficit de vitamina D? Pues que nuestro cuerpo la obtiene directamente de los huesos y si es así los debilita pudiendo provocar la temida osteoporosis.
Pero no solo es beneficiosa para nuestros huesos, según la prestigiosa
Clínica Mayo ”
La vitamina D también parece desempeñar un papel importante en la producción de insulina y la función inmunitaria, y en cómo esto se relaciona con la prevención de enfermedades crónicas y el cáncer, pero esto todavía se está investigando”.
¿Qué hacer entonces? Lo más importante es mantener una
dieta rica en vitamina D y por otro lado
aprovechar la exposición al sol de nuestro cuerpo, ya que de esta manera generamos vitamina D de forma natural. En primavera y verano con 15 minutos de exposición al sol es suficiente para mantener los niveles saludables de vitamina D. Solo con exponer nuestra cara y brazos es suficiente.
Aunque claro, en la situación de confinamiento que estamos viviendo no es tan fácil tomar el sol, pero siempre tendremos una ventana o balcón a mano y de esta manera, aunque esté nublado, podemos cubrir nuestra necesidad de sol. Eso sí,
siempre protegido con cremas protectoras de al menos factor 30, y no hacerlo entre las 14:00 y las 16:00 h que son las peores horas para nuestra piel.
Y cómo no, la
alimentación, también es fundamental que esté orientada a mantener los niveles de vitamina D, especialmente en los niños y las personas mayores, hay que
aumentar las dosis semanales de alimentos como
pescados azules y huevos, rebajando la cantidad de carne en la dieta.
Por último está el tema de los
suplementos para aumentar el nivel de vitamina D si tenemos déficit, esto solo debe hacerse bajo supervisión médica, ya que se necesita una analítica para conocer el estado de dicha vitamina en nuestro cuerpo, y
no debemos tomar estos suplementos sin supervisión ya que el exceso de vitamina D tiene
efectos perjudiciales.