Para muchos es una ventaja, para otros no supone ningún beneficio, pero en todos los casos tiene una serie de aspectos a considerar que conviene tener en cuenta para que sea fácil y práctico a la hora de ponerlo en marcha

Ríos de tinta electrónica y de la real se han vertido sobre este tema tan “polémico” pero que ha venido para quedarse en mayor o menor medida, dependiendo de las empresas y los sectores de actividad. Quién nos iba a decir que los maestros enseñarían por video conferencia, pero ese es otro tema que ya veremos otro día. Hoy nos vamos a centrar en los aspectos básicos necesarios del teletrabajo a la hora de ponerlo en marcha en nuestra casa.

Como aun tenemos unos días antes de que la actividad vuelva a la normalidad, podemos repasar que necesitaremos para que podamos teletrabajar con garantías y en las mejores condiciones físicas y mentales, ya que redundará en nuestro rendimiento y en la conciliación con la familia y sus actividades.

Ubicación, es el primer aspecto a tener en cuenta, y desde luego dependerá mucho de cada casa por lo que hay que definir al menos las características mínimas a reunir, sin ninguna duda lo primero que necesitaremos es tener un cierto aislamiento de las actividades del día a día de la casa y la familia, de esa manera también conseguimos separar el tiempo de trabajo del tiempo para la familia, que es fundamental. También debes considerar que pasarás muchas horas y la silla y demás elementos deben ser ergonómicos y ofrecer garantías a tu salud.

Vale cualquier solución adaptada a tu economía que cumpla con esos criterios de independencia y ergonomía, no solo física también acústica: un rincón del salón, un armario que haga de oficina y pueda cerrarse cuando terminas la jornada, etc. No intentes replicar una oficina, es tu casa y trabajaras en ella en las condiciones más adecuadas.

Conexión a Internet, con fibra óptica o al menos alta velocidad, no necesita mucha literatura esta cuestión, teletrabajar supone estar realizando tu actividad laboral a distancia y poder acceder a los recursos necesarios, mantener reuniones, etc. necesitará de una buena conexión a Internet, contrata la mejor disponible en tu zona y que te puedas permitir. Algunas empresas se la facilitan a sus empleados, pero si eres autónomo tendrás que hacerlo tú.

Informática, como en el caso anterior, por muy buena conexión que tengas, sin no dispones de un ordenador adecuado, con cámara para poder realizar video llamadas, un micrófono integrado, un buen monitor, etc. te será prácticamente imposible trabajar desde casa. No es necesario gastar una fortuna, solo asesorarse de lo más adecuado a cada caso.

Horarios, no debes olvidar que debes cumplir con unos horarios ya que sino la jornada se extenderá hasta el infinito y más allá. Teletrabajar no es sinónimo de trabajar todos los días a todas horas, hay que establecer la jornada laboral, las pausas, y por supuesto el tiempo para el resto de actividades de la casa, que también necesitan sus horarios.

Distracciones, este apartado es muy importante y está vinculado con el primero, con la ubicación del puesto de trabajo, pero también tiene que ver con aspectos vinculados a los diferentes canales de comunicación que utilizamos día a día. Es muy conveniente “aislarnos” de tentaciones en forma de distracción que suponen WatsApp, Facebook, los emails personales, etc. Durante la jornada laboral debemos desactivarlos y darles su espacio en el resto de la jornada.