Van ganado terreno en la movilidad de las ciudades, especialmente por la necesidad de evitar emisiones de gases de efecto invernadero, pero no solo por eso, la salud y otros beneficios apoyan su uso.

Desde principios de 1800 la bicicleta está presente en nuestras vidas. Comenzó siendo una alternativa al coche de caballos, caro de mantener, y ahora ya está presente como alternativa al transporte por sus beneficios ecológicos y de todo tipo, especialmente en las grandes ciudades. Aunque ha tenido largos periodos de vinculación a los movimientos ecologistas, la verdad es que ya en los últimos años 60 era el juguete preferido por los niños de la época para incluirlo en la carta a los Reyes Magos.

Y ha soportado el paso de más de 200 años y aquí está, renovada y tan presente como siempre, con alternativas que ayudan a realizar el menor esfuerzo posible, como es el caso de las que incorporan un motor eléctrico de apoyo al pedaleo, incluso soluciones de alta tecnología plegables y eléctricas que permiten llevarlas a todas partes con facilidad. Todo un abanico de opciones que hace algo complicado elegir la solución más adaptada a nuestro caso.

Pero una bicicleta no deja de ser un vehículo de dos ruedas y por lo tanto necesitamos contemplar las normas de uso y de seguridad, ya que no todo es comprar y pedalear sin más. Por ejemplo, nos vendrá bien consultar las normas de tráfico que nos indicarán por donde podemos usar nuestra bici, cómo debemos usarla, etc. te dejamos este enlace en el que podrás consultar, de forma amena, todo lo que afecta a las normas de uso de las bicicletas.

Este paso previo te dará acceso a la siguiente cuestión: ¿qué bicicleta comprar? Vamos a tratar de ayudarte. Lo primero a tener en cuenta es el uso que vas a dar a la bicicleta, ya que no todas las bicicletas valen para todo tipo de uso. Por ejemplo, si vas a salir en fin de semana a dar un paseo en familia por el campo, lo más adecuado sería una bicicleta de las denominadas híbridas y que puedes utilizar en zonas urbanas y por caminos rurales, si eres un aficionado a salir por carretera en grupo tu bicicleta será de las clásicas bicis de carretera ligeras y con un sistema de cambio de marchas alto más técnico y pensadas para la velocidad. Y por supuesto existen las bicicletas de paseo que sirven para dar una vuelta por la ciudad, paseos marítimos, etc. sin mayor pretensión.

El siguiente paso será fijar tu presupuesto, este aspecto es fundamental ya que hay una gama de precios muy importante y tu presupuesto manda, considerando además que no siempre lo más adecuado para ti es elegir la más cara.

Ya solo queda buscar la tienda que más te guste y seleccionar la talla de tu nueva bici, si la talla, parece algo raro, pero es fundamental que la bici se adapte a tu físico y estado de forma, para ello tienes una sencilla fórmula: multiplica tu altura de entrepierna por 0,65. La altura de entrepierna es el indicador más adecuado para calcular la talla correcta de una bicicleta en la mayoría de las personas. Aquí tienes otro enlace útil, que la disfrute.